Un año más el curso llega a su fin, y lo hemos terminado realizando un proyecto en el aula taller donde los estudiantes pueden vivir lo que son las distintas fases del proceso tecnológico, realizando un proyecto ellos mismos. Además sirve de integración de los contenidos vistos a lo largo del curso tanto de informática, dibujo técnico, mecanismos y electricidad.
En este curso, nuevamente la propuesta era la siguiente:
DISEÑA Y CONSTRUYE UN PROGRAMADOR CICLICO ELECTROMECANICO que cumpla las siguientes características:
Ø OBLIGATORIAS:
- Dimensiones máximas: Altura 240mm, anchura 180mm, profundidad 280mm
- Al accionar el interruptor el semáforo o cartel luminoso deberá iluminarse alternativamente. (4p)
- La estructura deberá cumplir propiedades de estabilidad, resistencia y rigidez (1p)
Ø OPCIONALES:
- Circuitería oculta (1p)
- Accesibilidad para cambio de repuestos: pilas, LED, etc (1p)
- Intermitencia en alguno de los períodos (p ej. En el naranja del semáforo) (1p)
- Ø Estética: acabados y pintado (1p)
Para ello, tenían que tomar decisiones sobre los siguientes elementos del sistema:
- Transmisión de movimiento (mecanismo reductor)
- Elemento movible
- Programa
- Interruptores
- Receptor
Este curso, quizás el calendario ha ido en nuestra contra, puesto que la manera de caer la Semana Santa, y la coincidencia con algunas actividades complementarias como el Intercambio con DAX ha hecho que hayamos tenido poco tiempo.
Las consecuencias es que los proyectos han sido menos creativos que en otros cursos. No obstante, aquí os voy describiendo algunas de sus soluciones con fotos:
TRANSMISIÓN DE MOVIMIENTO (MECANISMO REDUCTOR)
La solución estrella ha sido el mecanismo tornillo sin fin-corona.
Sólo algún otro grupo se ha atrevido a innovar, introduciendo un sistema de poleas con correa intermedio para reducir todavía más el movimiento
Y un único grupo que se ha atrevido a meter el motor debajo de la tabla, y transmitir el movimiento a través de un sistema de engranajes simples
ELEMENTO MOVIBLE
En este caso también tenían que decidir qué elemento movible iban a utilizar para dar el carácter cíclico al programador. Nuevamente existía una opción convencional, que es el bote de hojalata.
Un único grupo se ha animado a usar un disco como elemento movible
Y otro grupo ha usado un rollo de papel higiénico forrado, aunque la fragilidad del material ha hecho difícil el que no se deformara tanto en la construcción como en el montaje.
PROGRAMA
El programa que sigue el receptor viene dado por las pistas que se introducen en el elemento movible, y que marcan el momento y la duración de cada uno de los períodos en que se accionan los interruptores. La opción más escogida ha sido buscar un bote conductor, y marcar las pistas con cinta aislante.
En muchas ocasiones, los grupos se encontraron con que sus botes no estaban hechos de material conductor, por lo que tuvieron que forrarlos primeramente de un material con esas propiedades, y posteriormente ponerles la cinta aislante según un plano previamente diseñado por ellos tal y como se ve en la figura superior.
Sólo un grupo se ha animado a usar un sistema de levas, unido a interruptores final de carrera, para marcar el programa, tal y como se ve en la figura.
INTERRUPTORES
El interruptor elegido está indisolublemente unido al elemento movible. En el caso de los botes, los interruptores han sido chapas metálicas que hacían contacto en el mismo bote
En el caso del disco se ha utilizado alambres y en las levas interruptores comerciales finales de carrera como hemos visto en las fotos previas
RECEPTOR
Normalmente en este apartado es donde aparece la mayor variedad y creatividad, y por eso ha sido el que más ha sufrido las consecuencias de la falta de tiempo. En muchos casos, los grupos se han concentrado en el elemento movible y la transmisión de movimiento, dejando el receptor a tres simples bombillas.
Como siempre ha habido elecciones más clásicas como el caso del semáforo en distintos tamaños y colores, tal y como habéis visto en las fotos anteriores. También algún edificio o coche de distintos motivos, y en los que la creatividad ha llevado a la utilización de materiales reciclados para su construcción, cosa que también era puntuada por la profesora.
En algún caso diseñando elementos que permitieran tapar su estructura, como en el caso de este hotel.
O de este molino con noche estrellada, muy trabajado estéticamente
Y aunque este curso me quedo con una sensación agridulce, debido a las dificultades por la falta de tiempo, por otro lado me pongo a realizar balance mediante la publicación de entradas como esta, y me doy cuenta que sigue siendo un "pequeño milagro" lo que sucede cada año, y el cambio que se produce en ellos desde que en marzo comienzan hasta los nervios de última hora quedándose todos los recreos porque quieren terminarlo, o la alegría en sus caras cuando le damos al interruptor y ven que funciona.
Y reitero: me gusta verles trabajar en equipo, repartir tareas, discutir propuestas, echarse las culpas, reconciliarse, vaguear, espabilarse....Es cierto que se pasan nervios, que siempre dejan para el final más de lo que se debería, que en no pocas ocasiones hay discusiones, descoordinación...pero lo cierto es que en general, todos terminan con una sensación de haberse desafiado y haber sido capaces de construir con sus propias manos y en equipo algo que va más allá de una teoría, una fórmula o un examen. Algo que se ve, se toca...y si hay suerte, hasta funciona.
Y para que lo comprobéis aquí tenéis un video con los proyectos que sí han funcionado.
Por mi parte, enhorabuena a todos por el trabajo realizado, disculpad si en algún momento de mi tarea "dinamizadora" de los grupos os he gruñido demasiado y ¡¡FELIZ VERANO !! y nos vemos en septiembre
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